Se conoce como neutrófilos a una tipología de glóbulos blancos. Responsables de defender el organismo de bacterias y agentes externos. Se dividen en neutrófilos segmentados y en banda.
Los niveles de estos glóbulos suelen aumentar o disminuir en la sangre. Las células con mayor concentración en la sangre son de este tipo, y se encargan de involucrar las infecciones con las lesiones para después eliminarlas.
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Tipos de neutrófilos
Los neutrófilos cumplen la función de defender al organismo. Se dividen en dos categorías:
- Neutrófilos segmentados: también conocidos como maduros, abundan en el torrente sanguíneo. Para combatir los gérmenes se trasladan a los tejidos cuando inicia la fase de inflamación. El proceso se realiza por medio de las arterias, trasladándose al tejido intersticial.
- Neutrófilos en banda: corresponden al tipo que no ha llegado a la maduración, es decir, son inmaduros. Se encuentran en reserva en la médula ósea. Al detectar la presencia de una infección por bacterias aumentan su volumen.
En concreto, para que los neutrófilos segmentados o maduros se desarrollen se evidencia un proceso que es producto de glóbulos blancos inmaduros, conocidos como progenitores. Se trata de una producción muy regulada, ya que el cuerpo desarrolla más neutrófilos en el desarrollo de una infección y luego se normaliza cuando la afección se controla.
Niveles de neutrófilos
El número de neutrófilos segmentados, son evaluados a través de la realización de un hemograma completo. En este proceso, se verifican todos los glóbulos blancos contenidos en la sangre. Asimismo, los leucocitos también se evalúan en un área específica del estudio y se denomina leucograma. La neutrofilia produce aumento de los niveles de neutrófilos por encima del valor normal. Mientras que la neutropenia corresponde a una disminución de los niveles.
Este tipo de glóbulos blancos, representan una mayor cantidad que los valores normales. Los mismos se activan por reacciones inmunes, siendo una defensa principal en contra de las infecciones. La elevación de los neutrófilos, también se determinan por los porcentajes totales de los glóbulos blancos cuando están por encima del 70%. Sin embargo, se recomienda, que se realicen los estudios basándose en las cantidades absolutas determinadas.
Las infecciones, en especial las bacterianas, son la causa principal de la neutrofilia. Por ello, la mayoría de los casos se acompañan de fiebre y aparición de estas células asintomáticas o en bandas. Ciertos estímulos fisiológicos como el traumatismo, quemaduras o estrés también pudiesen generar aumento de estos en la sangre.
Neutrófilos segmentados con niveles bajos (neutropenia)
Cuando los neutrófilos disminuyen, son conocidos como neutropenia. La cual, se presenta con muy pocos glóbulos blancos en la sangre. Además, dichos glóbulos son los que ayudan al cuerpo para que puedan combatir graves infecciones. Generalmente, solo se llegan a determinar estos valores en el momento que se realizan estudios sanguíneos por otras causas.
Con solamente un análisis de sangre se determinan los niveles bajos de neutrófilos, pero esto necesariamente no significa padecer de neutropenia. Dichos niveles varían diariamente, así que para comprobar deberá repetirse diferentes veces para confirmarlo. Estos problemas pueden hacer que el organismo sea más vulnerable a las infecciones. En el caso de alteraciones extremas, las bacterias se presentan en la boca, y el sistema digestivo genera enfermedades graves.
Neutrófilos segmentados con niveles altos (neutrofilia)
El descubrimiento de la neutrofilia puede ser originado por un proceso infeccioso. Los cuales, podrían ser apendicitis, faringitis, pancreatitis, entre otros. En casos en que las causas de las alteraciones no sean evidentes, la presencia de otros síntomas clínicos son determinantes. Es muy importante tomar en cuenta que pueden tratarse de procesos bacterianos como osteomielitis o tuberculosis.
Cuando estos problemas en los glóbulos blancos aparecen, se acompañan de promielocitos y mielocitos. Así como también, se interpreta el incremento de la esplenomegalia inexplicable y los basófilos. Es relevante tener presente que la causa pudiese ser debido a diferentes síndromes mieloproliferativos. En el cual, los pacientes deberán ser diagnosticados y posteriormente se les indicara los tratamientos a seguir.